El screening del cáncer de próstata se realiza habitualmente mediante la dosificación del PSA (antígeno prostático específico). Se realiza en pacientes con antecedentes familiares de cáncer de próstata a partir de los 45 años y en pacientes sin antecedentes a partir de los 50.
Cuando las cifras del PSA están en rango de sospecha (por encima de 4ngrs/ml) y el tacto rectal es sospechoso de malignidad, se realiza la biopsia prostática como diagnóstico definitivo.
La falta de especificidad del PSA hace que se lleven a cabo muchas biopsias con resultado posterior negativo (el 60% de los casos). Esto está provocando que actualmente, se estén utilizando otros marcadores que permitan evitar la realización de dichas biopsias negativas, con la consiguiente molestia para el paciente.
El Dr. Roque Ocete, realiza los nuevos marcadores como son el PCA-3 y el 4Kscore test, los cuales permiten evitar la realización y repetición de biopsias negativas así como, poder planificar una mejor realización del screening prostático, en los casos en los que las posibilidades de padecer cáncer de próstata de alto grado sean mínimas.